jueves, 22 de septiembre de 2016

CONOZCA QUIENES SON: LA IGLESIA ADVENTISTA

  LA IGLESIA ADVENTISTA DEL SEPTIMO DIA
El profesor Nathan Busenitz, dice de este grupo religioso:
“La Iglesia Adventista del Séptimo Día comenzó como un movimiento basado en las enseñanzas de un predicador laico llamado William Miller (1782-1849). Miller, después de haberse embarcado en un estudio personal de la Biblia (en particular Daniel 8:14), se convenció de que Cristo regresaría entre el 21 de marzo de 1843 y 21 de marzo de 1844. Cuando dicha predicción falló, Miller y sus seguidores ajustaron la fecha para el 22 de octubre de 1844.
Pero cuando el Señor no regresó el 22 de octubre de 1844, sus seguidores, conocidos como milleritas, experimentaron lo que llamaron “el gran chasco,” pues se dieron cuenta que las enseñanzas y predicciones de Miller habían sido totalmente falsas. Sin embargo, un pequeño grupo de milleritas insistió en que la fecha que Miller identificó no pudo haber sido un error, y afirmaron que el error de Miller no estuvo en sus cálculos matemáticos, sino más bien en lo que él espera que pasara en esa fecha. Consecuentemente ellos concluyeron que ya que era imposible que tal fecha fuese errónea, algo, otra cosa que no fuese el regreso de Cristo, tuvo que haber ocurrido en 1844; es de ese grupo de donde surge la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
Phil Johnson señala la ironía de establecer un movimiento religioso sobre la base de una predicción profética falsa.
A principios de la década de 1840, el movimiento millerita se había convertido en un enorme fenómeno internacional. En un lapso de cinco meses en 1843, más de 600,000 ejemplares de la literatura millerita se habrían distribuido en Nueva York solamente. Tan popular fueron sus ideas, que personas vendieron sus casas, regalaron sus posesiones y renunciaron a sus medios de vida con fin de demostrar su fe en las predicciones de William Miller.
Entonces, ¿qué creen los Adventistas que ocurrió el 22 de octubre de 1844? De acuerdo con la enseñanza de la iglesia adventista, Cristo, como un gran sumo sacerdote de la iglesia, se encuentra llevando a cabo un trabajo final de expiación y juicio en el cielo. Pero fue el 22 de octubre de 1844 cuando finalmente pudo trasladarse del Lugar Santo al Lugar Santísimo para así completar dicha obra expiatoria.
Esta explicación creativa para la predicción fallida de Miller se vio reforzada por las enseñanzas de una joven llamada Ellen Harmon (1827-1915), la cual aparentemente comenzó a experimentar visiones en 1844, poco después del gran chasco. Considerada como una profetisa, Harmon (conocida por su nombre de casada, Ellen G. de White) se embarcó en una carrera prolífica en la enseñanza y la interpretación de las  Escrituras. Sus interpretaciones de la Biblia y supuestas revelaciones se convirtieron en la base principal del movimiento adventista.
Hoy en día hay alrededor de 18 millones adventistas del séptimo día en todo el mundo.” (1)

 Juan Liendo añade sobre esta denominación:
Una característica diferencial  de los Adventistas es el asunto del sábado. Ellos insisten que hay que ir a la iglesia el sábado y no el domingo y algunos han identificado el sábado como "el sello de Dios" diciendo que los verdaderos cristianos son los que "guardan" el sábado y no el domingo. Los Adventistas ponen mucho énfasis en los asuntos de comidas de acuerdo a lo prescrito en la ley Mosaica del Antiguo Pacto por lo que se abstienen de ciertas comidas que consideran inmundas. Los Adventistas son muy activos en el campo de la educación y la  beneficencia social, fundando escuelas y hospitales.  También se ocupan de la predicación de sus doctrinas de forma activa y promueven la educación de sus miembros por medio de Seminarios y cursos por correspondencia. (2)

Página web oficial de España, muy bien elaborada: http://adventista.es/

NOTAS
(              (1)    Nathan Busenitz (Ph.D.) es profesor de teología histórica en The Master’s Seminary: http://www.tms.edu/es/predicadores-y-la-predicacion/por-que-no-creemos-en-la-iglesia-adventista-del-septimo-dia/
 (2) Texto adoptado del artículo: “Preguntas sobre los Adventistas del Séptimo Día”. Juan Liendo: https://pastorjuanliendo.wordpress.com/page/123/

PARA SABER MAS
·         “Los Adventistas y la verdad”. Billy Vicente en: http://www.monografias.com/trabajos14/adventistas/adventistas.shtml
·         “Los Adventistas, ¿son Evangélicos?”. Kenneth R. Samples.
En:
http://protestantedigital.com/magacin/10907/Los_adventistas_son_evangelicos


miércoles, 21 de septiembre de 2016

PASTOR YEBRA SE ALEJA DE LAS DOCTRINAS BAUTISTAS



TIEMPO DE REFLEXION PARA LOS BAUTISTAS ESPAÑOLES (I)
Un llamado a reflexionar sobre lo que está aconteciendo entre los Bautistas españoles.
Escrito por Jesús Reigada
*La U.E.B.E., Unión Evangélica Bautista Española, es una de las grandes entidades Evangélicas en España. Según el censo de 2015 agrupaba unos 11.000 miembros, y unos 30.000 simpatizantes. No es un gran número, pero aun así sigue siendo importante dentro del llamado Protestantismo hispano. Líder en el pasado, ha sido ya superado por otras religiones y denominaciones:  Adventistas, Testigos de Jehová, Musulmanes, Asambleas de Dios, y otros.
Existe también la F.I.E.I.D.E., Federación de Iglesias Evangélicas Independientes de España. De origen y tradición Bautista, mantiene una especie de intento de equilibrio interdenominacional que no es real.
También tenemos iglesias Bautistas Fundamentalistas, Iglesias Bautistas Bíblicas, etc. Mantienen doctrinas y aspectos sanos de la tradición Bautista, pero tienen otros claramente discutibles. Por ejemplo, su insistencia en la Confesión de Fe de cómo ocurrirá la 2ª venida de Cristo, cuando aquí, dentro de determinados límites, debería ser posible una amplitud de opinión.
Las estadísticas de la UEBE indican que en los últimos años no es que haya un estancamiento, sino un retroceso. Y un motivo es que dentro de la Denominación hay Pastores e iglesias que no siendo Bautistas, se han adherido a la misma. Es decir, dentro de la UEBE ni son todos los que están ni están todos los que son, porque al contrario hay iglesias sanas y de corte Bautista que deberían estar dentro de la UEBE.
Como dice la Escritura, ocurre dentro de la UEBE:
“En esos días no había rey en Israel; cada uno hacía lo que le parecía bien ante sus ojos.“ Jueces 21:25.La Biblia de las Américas.
Parece que cada Pastor, líder o iglesia, actúa por su cuenta. Mientras no se salga de la ortodoxia bíblica, sería tolerable. Pero no siempre es así.
EL CASO DEL PASTOR JOAQUIN YEBRA.
El Pastor Joaquín Yebra, pastor titular de la “Comunidad Cristina” Eben-Ezer en el barrio de Vallecas, en Madrid, se afilió a la UEBE, y a día de hoy tiene a su cargo varias misiones en diferentes puntos del país.
En la página web de la iglesia (http://www.ebenezer-es.org/)  se presentan varios escritos del Pastor Yebra, algunos bíblicos, otros opinables-y algunos y esto es lo serio-fuera de nuestra órbita Bautista.
A día de hoy,2016, la Comunidad Cristiana Eben-Ezer va camino de constituirse en una iglesia sabatista, y de afiliarse a alguna Denominación seguramente sería a la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
Veamos. El primer indicio lo encontramos en su escrito: ”Y DESPUÉS DE LA MUERTE, ¿QUÉ?”(2005), donde presenta la teoría del sueño de las almas, que al morir no sobrevive nada y la creencia en el aniquilamiento final, no en cielos e infierno eternos. Esta es exactamente la doctrina defendida por la Iglesia Adventista ( y los Testigos de Jehová, por cierto).
En general, los Bautistas han enseñado lo que sintetizado Ted Davis:
“Los Testigos de Jehová, los ASD, y otros que proponen el "Sueño del Alma" no yerran al decir que no existe enseñanza dualista bíblica entre el alma humana y la vida física. Ciertamente el punto de vista Hebreo no es que el hombre posea un alma, totalmente separada del cuerpo, sino que el hombre es un alma que incluye su cuerpo mortal y su espíritu inmortal. Varios pasajes relevantes indican que una persona tiene una existencia espiritual consciente después de la muerte y antes de la resurrección del cuerpo.
Por ejemplo, en Mateo 22:31, 32, Jesús, respondiendo a la pregunta del matrimonio, la vida después de la muerte y la resurrección, cita Éxodo 3:6 y añade Su comentario de autoridad: "¿No han leído lo que dijo Dios, cuando dice "Yo soy el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob?" Él no es Dios de muertos, sino de vivos." Las palabras de Jesús claramente implican que los patriarcas Abraham, Isaac y Jacob estaban en los días de Jesús aún vivos, de alguna manera. ¿Haría Él una afirmación similar si estuvieran muertos espiritualmente?
De la misma manera, en Lucas 16:19-31 Jesús narra la historia de Lázaro y el hombre rico. Según esta historia, el pobre y justo Lázaro mueren y va al "seno de Abraham" mientras el rico perverso (cuyo nombre no se menciona) muere y va al Hades. En ambos casos, se les presenta como conscientes, atentos y comunicativos. Los defensores del Sueño del Alma sostienen que la historia es sólo una parábola sin interpretación literal. Si esto es así, sería entonces la única parábola que haya contado Jesús que no hubiera sido posible en la vida real, al menos de manera concebida. Aun las otras parábolas de Jesús resultaron ciertas de acuerdo a la vida, aunque no se tratara de hechos reales. Así pues, ¿cuál sería el caso de que el Señor usara información falsa para enseñar una verdad tan crucial relacionada con el destino de los muertos?

Otro evento clave donde las palabras de Jesús contradicen la idea del Sueño del Alma es cuando le habla al ladrón arrepentido en la cruz (ver Lucas 23:39-43). Después de la confesión del ladrón y su solicitud de clemencia, Jesús le respondió, "En verdad te digo, hoy estarás conmigo en el paraíso". Esta aseveración contradice la posición del Sueño del Alma. ¿Qué quiso decir Jesús con "hoy estarás conmigo" si el ladrón no tendría vida consciente después de morir? Algunos argumentan que los traductores malinterpretaron el pasaje poniendo una coma entre las palabras  "tú" y "hoy".  Algunos argumentan que como el griego original no tenía puntuación, también podía leerse como "en verdad te digo hoy, estarás conmigo en el Paraíso" (una promesa de resurrección).  Sin embargo, esta interpretación no parece muy probable. Jesús usó la frase "En verdad te digo" muchas veces en los evangelios como una validación de su autoridad  divina. En ningún lugar agregó algún condicionamiento temporal tal como el "hoy". Claramente el término "hoy" en el contexto debía ser adherido a la promesa; ese día el ladrón estaría con Jesús en el paraíso.
Uno de los eventos más dramáticos que agrega peso en esta cuestión es la transfiguración de Jesús (ver Mat. 17:1-8; Marcos 9:2-8; Lucas9:28-36, y 2ª Pedro 1:16-18). Pedro, Santiago y Juan personalmente escucharon la voz de Dios y testificaron la aparición visible de Moisés y Elías hablando con Jesús. El problema obvio para los defensores del Sueño del Alma es explicar cómo Moisés que había muerto siglos antes (ver Deut. 34:5,6), pudo aparecer súbitamente y conversar con Jesús y Elías (Elías no había muerto, sino que fue llevado por un carruaje de fuego, ver 2ª Reyes 2:11).
Quizá la declaración clásica de Jesús en relación a esto es cuando recibió las noticias de la muerte de su amigo Lázaro. Avisado por su hermana Marta del deceso de su hermano, Jesús le contestó diciendo "Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto vivirá".
El apóstol Pablo en sus cartas, igualmente, presenta evidencia de que no hay interrupción de la conciencia en la muerte al menos para el creyente en Cristo.
En 2ª. Corintios 5:6-8 (RVA) Pablo contemplaba la muerte: "Así que vivimos confiados siempre, sabiendo que entretanto que estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor (porque por fe andamos, no por vista.) Pero confiamos y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor." (RVA)

Pablo implica que si él muriera, sería separado de su cuerpo físico por un tiempo pero estaría presente ante el Señor Jesucristo en un sentido espiritual. Por tanto, para Pablo el anticipar la muerte no le aterrorizaba. Esto contradice claramente el punto de vista del Sueño del Alma.

En la misma epístola (ver 2ª. Cor. 12:2-4) Pablo describe a "un hombre" que, catorce años antes de su escrito, fue arrebatado "al tercer cielo" o "el Paraíso". La mayoría de los académicos del Nuevo Testamento creen que hablaba de sí mismo. En cualquier caso, Pablo declaró dos veces que no sabía si el hombre "había sido llevado en el cuerpo o fuera del cuerpo." Si no hay existencia consciente separada del cuerpo, entonces él tendría que haber estado "en el cuerpo." Pero Pablo dice sólo "Dios sabe", sugiriendo al menos la posibilidad de un estado vivo de conciencia no material.

De manera similar, Pablo habla de su posible martirio en Filipenses 1:12-26.  Evidentemente no piensa que pudiera ser muerto en ese momento ya que Dios le tenía aún mucho trabajo encomendado. Sin embargo, reconoce que, aunque muriera, sería ventajoso para él:

"Porque para mí, el vivir es Cristo, y el morir es ganancia. Mas si el vivir en la carne resulta para mí en beneficio de la obra, no sé entonces qué escoger. Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor; pero quedar en la carne es más necesario por causa de ustedes" (Fil. 1:21-24, RVA)

Los defensores del Sueño del Alma no pueden explicar las palabras de Pablo si no creyera que vería a Jesús de inmediato después de su muerte, como fuera que esto ocurriera, pero no en el cuerpo.
Otra de las cartas de Pablo nos da alguna pista sobre el destino de los creyentes muertos. En 1ª. Tesalonicenses 4:13-18, Pablo escribe acerca de los que están "dormidos" o "muertos en Cristo". Éstos eran creyentes que murieron antes del regreso del Señor. Sostiene que éstos acompañarán al Señor en su regreso y serán los primeros en resucitar de los muertos. Los defensores del Sueño del Alma dirían que esto se ajusta a su pensamiento. Sin embargo, en el capítulo cinco de la misma carta, Pablo habla del estado presente de vivos y muertos, y a la espera del regreso futuro del Señor, diciendo:
"Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio  de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que ya sea que (tiempo presente) velemos (vivos), o que durmamos (muertos), vivamos juntamente con Él." (1ª. Tes. 5:9-10 RVA).” (http://es.4truth.net/fourtruthespbdenominations.aspx?pageid=8589983754
La Confesión de Fe de la Iglesia Bautista de Basauri (2014) dice sobre este asunto :
Artículo XVI. LOS JUSTOS Y LOS IMPIOS
“Creemos que las Escrituras enseñan que hay diferencia radical y esencial entre los justos y los impíos, que en la estimación de Dios no hay justos verdaderos aparte los regenerados; éstos han sido justificados por el Espíritu Santo, que a los ojos de Dios, son impíos y condenados cuantos voluntariamente siguen impenitentes e incrédulos; y que es permanente esta diferencia entre unos y otros al morir y después de la muerte.
Proverbios 14:32; Eclesiastés 3:17; 11:9; 12:13,14; Lucas 12:4,5; Juan 12:25-36; Romanos 1:17; 1 Pedro 4:17,18.”
XVII.-LAS ULTIMAS COSAS
“Creemos que Dios, a su debido tiempo y a su manera, conducirá el mundo a su fin.
De acuerdo a su promesa, Jesucristo volverá al mundo en forma personal, visible y gloriosa. Los muertos serán resucitados y Cristo juzgará a los hombres con justicia. Los impíos serán destinados al infierno, el lugar de castigo eterno. Los justos, con cuerpos resucitados y glorificados, recibirán su recompensa y morarán eternamente en el cielo con su Señor.
Isaías 2:4; Mateo 16:27;Lucas 12:40,48;16:19-26;Hechos 1:11;2 Corintios 5:10;2 Pedro 3:1-15;1 Juan 2:28; Judas 7,8,14,15,28; Apocalipsis 1:17,18; 20:1-22:13.”


Para un estudio completo de este tema sugiero la lectura de “Teología Sistemática” de J.Oliver Buswell,Jr.:Tomo IV, Escatología, con casi 250 páginas. Se lee en:
Tiene una línea conservadora-evangélica.

Si bien ya este trabajo parece polémico, el Pr. Yebra da un paso más en su identificación con el Adventismo, y publica en 2014: “El shabat, corona de la Creación”y en 2015: “El cambio del sábado, santo día de reposo establecido por Dios, por el primer día de la semana, dedicado al Sol”.  Todo el libro es una apología de la postura sabatista. No hay espacio para rebatir cada punto, y por otra parte no aporta nada nuevo que no sepamos desde hace décadas en cuanto a los argumentos de los partidarios del sábado. Pero podemos poner un par de ejemplos.
Prefacio, dice el Pr. Yebra:
"Jesús guardó el sábado incluso en la sepultura, y sus discípulos dejaron que transcurriera el tiempo de reposo del Séptimo Día para ir a ungir su cuerpo en el primer día de la semana".
Efectivamente, dice Lucas 23:56:" Entonces regresaron y prepararon especias aromáticas y perfumes, y reposaron el sábado conforme al mandamiento."
Pero es que como judíos que eran, no podían hacer otra cosa que obedecer "el mandamiento" de la Ley de Dios conforme al descanso del sábado. Pero de ahí inducir un mandato para los cristianos hay un abismo.
Sí es significativo, lo que ocurrió, como dice el Pr.Yebra "el primer día de la semana", es decir el Domingo. Ocurre la resurrección de Jesús. (Mat.28:1; Marc.16:1-2,9; Luc.24:1;Juan 20:1,19). Como recordatorio de este hecho, llegó a ser el día de reunión de los cristianos desde los primeros tiempos. Se menciona en Hechos 20:7 y en 1 Cor.16:2 y con frecuencia en la literatura cristiana de los primeros siglos después d.de C, donde se le llama "día del Señor", Apoc.1:10.
Sigue diciendo el Pr. Yebra:
"Cincuenta días después de la Pascua(…) un sábado (…) el Santo Espíritu descendió".
El pasaje a que se alude es el de Hechos, capítulo 2:1:"Al llegar el día de Pentecostés estaban todos reunidos en un mismo lugar."
Pr. Yebra sitúa este día en sábado. Pero prácticamente todos los comentaristas, incluyendo los Adventistas, los sitúan en Domingo.
Por ejemplo, dice un Comentario bíblico:
"según Juan (13:1, nota), Jesús murió el 14 de nisán, y el 16, segundo día de la pascua, fue el domingo que Jesús resucitó; y por consiguiente pentecostés cayó también en domingo. La tradición confirma este dato. La iglesia, en efecto, siempre ha celebrado pentecostés, lo mismo que la fiesta aniversaria de la resurrección del Salvador, el domingo".-Comentario del Nuevo Testamento: Tomo II. Juan y Hechos. Luis Bonnet y Alfredo Schoroeder. CBP.(1977) Pág.412.
El voluminoso comentario bíblico Adventista dice sobre este pasaje:
"La fecha de Pentecostés depende de la fecha de la pascua. El cordero pascual era sacrificado el 14 de Nisán. El 15 de Nisán comenzaba la fiesta de los panes sin levadura, y el 16 se mecía delante del Señor una gavilla de las primicias de la cosecha de cebada.(Lev.23:5-11).Desde el día 16 se contaban, de acuerdo con el cómputo inclusivo, siete semanas y un día, es decir, 50 días, hasta la fiesta de las primicias de la cosecha del trigo, que también se llamaba fiesta de las semanas, debido a las siete semanas que transcurrían.(Lev.23:15-16).Esta era la fiesta que llegó a conocerse con el nombre de Pentecostés.
En vista de que en el año de la crucifixión, el día 16 de Nisán cayó en domingo (vea la primera Nota Adicional de Mat.26), Pentecostés, 50 días más tarde, de acuerdo con el cómputo inclusivo, también habría caído en domingo ese año".- Comentario Bíblico Adventista: Hechos. En : http://advenz.com/comentario-biblico-adventista-en-pdf/
Es decir, el Pr. Yebra es más "sabatista" que los propios Adventistas.
Por otra parte, su posición sobre este tema queda muy claro:
Pág.72:"Naturalmente, el Séptimo Día es sin duda el día para la celebración especial del culto a Dios nuestro Señor. No nos cabe la menor duda al respecto".
Pág.77: "La restauración del sábado como Santo Día de Reposo será parte integrante de la Iglesia remanente fiel que aguarda al Señor…"
Lo grave de esta posición es que rompe la unidad de fe y orden. Porque si la iglesia del Pr. Yebra pasa a guardar el sábado, y enseña que no hay estado intermedio hasta la resurrección final, ¿qué comunión podemos tener?. Si un miembro de su iglesia se va a otro lugar, con estas doctrinas, no buscará una iglesia Bautista, sino una Adventista. Y si busca una Bautista, obviamente deberá ser discipulado de nuevo en la sana doctrina.
Alguien puede argumentar que también existen los Bautistas del Séptimo Día.Pero los Bautistas del Séptimo Día, si bien consideran el sábado como día de descanso y culto al Señor, aceptan como el grueso de las Iglesias Evangélicas, el llamado "estado intermedio", algo que no acepta el Pr. Yebra. Dice la Confesión de Fe de los Bautistas del Séptimo Día sobre este asunto:

" 4 EL MUNDO VENIDERO


Creemos que las Escrituras enseñan que se acerca el fin de este mundo (1ª Pedro 4.7), que en el día postrero Cristo descenderá del cielo (Hechos 1:11), y levantará los muertos del sepulcro para que reciban su retribución final (Hechos 24:15); que entonces se verificará una separación solemne (Mateo 13:49), que los impíos sentenciados al castigo, y los justos al gozo sin fin (Mateo 25:31 al 46), este juicio determinará para siempre, sobre los principios de justicia, el estado final de los hombres, en el cielo o en el infierno (2ª Tesalonicenses 1:9 al 12).
Creemos que el creyente al morir:

a) Su espíritu se traslada directamente al cielo (Eclesiastés 12: 7, Lucas 23:43 al 46; Hechos 7:59 y Lucas 16:22 y 23).
b) Sabemos que si nuestra morada terrestre (nuestro cuerpo),se deshace, tenemos de Dios una morada eterna en los cielos (2ª Corintios 5:1 al 6 y 8, Filipenses 1:22 y 23).
c) Para el creyente, el vivir es Cristo y el morir es ganancia (Filipenses 1:21; 2ª Timoteo 4.6 ss)
d) Ni la muerte nos puede separar del amor de Dios (la salvación) (Juan 3.16; Romanos 8.35 al 39).
e) Con la seguridad de que los muertos, no pueden comunicarse con los vivos, pues no tienen más parte en lo que se hace debajo del sol (Eclesiastés 9.5 y 6; Isaías 8:19 y 20; Lucas 19:31 y Deuteronomio 18:10 y 11).

“Los santos que se encuentren vivos en el último día no dormirán, sino que serán transformados,(1) y todos los muertos serán resucitados (2) con sus mismos cuerpos, y no con otros,(3) aunque con diferentes cualidades,(4) y éstos serán unidos otra vez a sus almas para siempre.(5)”
1. 1Co. 15:50-53; 2Co. 5:1-4; 1Ts. 4:17
2. Dn. 12:2 Jn. 5:28,29; Hch. 24:15
3. Job. 19:26,27 Jn. 5: 28,29; 1Co. 15:35-38,42-44
4. 1Co. 15:42-44,52-54
5. Dn. 12:2 Mt. 25:46

“Los cuerpos de los injustos, por el poder de Cristo, serán resucitados para deshonra;(1) los cuerpos de los justos, por su Espíritu,(2) para honra,(3) y serán hechos entonces semejantes al cuerpo glorioso de Cristo.(4)”
1. Dn. 12:2 Jn. 5:28,29
2. Ro. 8:1,11; 1Co. 15:45; Gá. 6:8
3. 1Co. 15:42-49
4. Ro. 8:17,29,30; 1Co. 15:20-23,48,49; Fil. 3:21; Col. 1:18; 3:4 1Jn. 3:2 Ap. 1:5.".- Copiado de:
http://bsd77.es.tl/Creencias-BSD.htm

De modo que, las doctrinas del Pr. Yebra son acordes con la Iglesia Adventista, con las cuales encaja perfectamente, y no con ninguna Denominación Bautista.
Las iglesias Bautistas,-con la excepción del pequeño grupo que sí guarda el sábado y que representa una parte insignificante de la Denominación- siempre han defendido que el Día del Señor es el Domingo.
Confesión de Fe Bautista de 1689:
" Así como es la ley de la naturaleza que, en general, una
proporción de Tiempo, por designio de Dios se dedique a
la adoración de Dios, así en su Palabra, por un
mandamiento positivo, moral y perpetuo que obliga a
todos los hombres en todas las épocas, Dios ha señalado
particularmente un día de cada siete como día de reposo,
para que sea guardado santo para Él; el cual desde el
principio del mundo hasta la resurrección de Cristo fue el
último día de la semana y desde la resurrección de Cristo
fue cambiado al primer día de la semana, que es llamado
el Día del Señor y debe ser perpetuado hasta el fin del
mundo como el día de reposo cristiano, siendo abolida la
observancia del último día de la semana."

Confesión de Fe de la Convención Bautista del Sur del año 2000:
"VIII. El Día del Señor El primer día de la semana es el Día del
 Señor. Es una institución cristiana que se  debe observar regularmente. Conmemora la resurrección de Cristo en entre los muertos y debe incluir ejercicios de adoración y devoción espiritual, tanto públicos como privados. Las actividades en el Día del Señor deben estar de acuerdo con la conciencia Cristina bajo el Señorío de Jesucristo."


Confesión de Fe de la Iglesia Bautista de Basauri (2014):
"VII.- EL DIA DEL SEÑOR
 Creemos que el Domingo, día del Señor, es el día de descanso cristiano, satisfaciendo plenamente la exigencia divina y la necesidad humana de tener un día de cada siete para reposo del cuerpo y del espíritu. Con la llegada del Cristianismo, el primer día de la semana pasó a ser el día del Señor, por haber resucitado Jesús en este día.
Este día lo apartamos de una forma especial para la adoración y devoción espiritual, tanto de forma pública como privada. Las actividades en el día del Señor deben estar de acuerdo con la conciencia cristiana bajo el Señorío de Jesucristo.
Génesis 2:3; Exodo 20:8-11; Mateo 12:1-12; 28:1ss; Marcos 2:27-28; 16:1-7; Lucas 24:1-3,33-36; Juan 4:21-24; 20:1,19-28; Hechos 20:7; Romanos 14:5-10; 1 Corintios 16:1-2; Colosenses 2:16;3:16;Apocalipsis 1:10."
Por lo tanto, no estamos hablando de opiniones legítimas dentro de la ortodoxia cristiana, sino de una grave separación de nuestras doctrinas e identidad como Bautistas.
Lamento profundamente, la deriva del Pr. Yebra hacia posiciones de la Iglesia Adventista, en la cual tardo o temprano recalará.
Mientras, alerto a los hermanos a y las iglesias afiliadas a la UEBE sobre la posible influencia insana de las doctrinas expuestas aquí.
Dios nos bendiga, ayude y alerte.
Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto te salvarás a ti mismo y a los que te escuchan.".- 1º Tim.4:16